Los inmuebles de mayor antigüedad o sobre 50 años, están más expuestos a una serie de riesgos, eventos que pueden ocurrir producto del paso del tiempo, de fenómenos de la naturaleza, accidentes en el hogar o por la acción de terceros.
¿Es difícil asegurar un inmueble antiguo?
Sí, pero no imposible.
La clave es evitar la frecuencia de siniestralidad. Y mantener en buen estado toda la estructura.
Comunas de la región Metropolitana como Providencia y Santiago Centro concentran el mayor número de inmuebles considerados antiguos.
El mantenimiento es vital en este tipo de bienes. Mientras mejor sea el estado de conservación, mayor será la probabilidad de asegurarlo frente a un siniestro.
¿Qué toman en cuenta las compañías de seguros?
- Reformas en tuberías, fachada y red eléctrica.
- El estado de conservación de la estructura.
- Comprobar siniestros recientes en zonas aledañas, entre otros tópicos.
Considerando que la vivienda es el bien más importante para una familia o una comunidad de vecinos, los expertos señalan que asegurarla es proteger y traspasar el riesgo a un tercero, para no enfrentar un costo económico a raíz de un siniestro.
Cómo administrar un seguro para edificios antiguos
Cuando un inmueble sobrepasa los 50 años de uso y no tiene un crédito hipotecario es necesario:
1.- Verificar si su póliza actual brinda condiciones para la antigüedad que tiene.
2.- Cuidar las condiciones que permiten calificar para este seguro.
3.- Consolidar un plan de mantenimiento riguroso.
3.- Evitar el uso de la póliza ante pequeños accidentes recurrentes que pueden corregirse.
Son pocas las compañías de seguros que prestan sus servicios a edificaciones en mal estado, con bajo nivel de conservación o de restauración.
En Chile no hay ninguna restricción para asegurar una vivienda antigua, ya que existen distintas alternativas para diversas necesidades al momento de proteger un bien.
Los interesados solo deben cotizar y ver qué alternativas tienen entre las que ofrece el mercado.
Busca asesoría profesional
Siempre se recomienda conseguir la asesoría de un experto para tomar una buena decisión, sobre todo en el caso de comunidades, porque siempre será un beneficio para las familias.
Hay ejemplos de personas que han vivido experiencias como incendios o daños en catástrofes, que pudieron salir adelante rápidamente gracias a que contaban con un seguro.
Normalmente una compañía de seguro exige una inspección previa y si producto de ese peritaje se concluye que el inmueble cumple con ciertas medidas de seguridad como cortafuegos, sistemas eléctricos en buen estado, material de construcción y entorno en que se encuentra ubicada (fábricas de químicos, combustible, etc.), puede asegurarla.
Lo primero que tiene que hacer una persona que quiere asegurar una vivienda antigua es ver exactamente qué necesita asegurar, si es por daños, incendios, sismos, robos o responsabilidad civil y, luego de eso, buscar la mejor alternativa en el mercado que se ajuste a sus necesidades y presupuesto.
